LA PRINCESA SE SUELTA LA MELENA
— ¡Puede que esta nena de ojos rasgados sea una auténtica princesa y no esta Dragon Lady, después de todo! ¡Todavía no ha hecho ningún movimiento!
— ¡Es un juego de espera, sargento! ¡Ah! ¡Llaman a la puerta! ¡Connie, abre!
— Ela chico con nota. Envial a la embajada melicana
— ¡Ja! ¡Nuestra dama da el primer paso! ¡Veamos!
Sr Preston Royce
Embajada de Estados unidos
Señor:
Debo admitir que me intrigaron sus impetuosos modales americanos en nuestro anterior encuentro.
Puesto que una princesa debe ser siempre cautelosa con las apariencias públicas, ¿no hay algún lugar retirado en el que podamos reunirnos lejos de las miradas entrometidas?
San Soo
— ¡Dios Santo, Ryan! ¡Tenía razón! ¡Incluso ha averiguado su nombre para poder escribirle!
— Quiere que la invite a mi alojamiento. Por ser el lugar lógico para guardar papeles tan importantes como los planos de los aviones.
NO VANIDOSA, SINO SEGURA DE SÍ MISMA
— Llegal calta pol soldado melicano.
— ¡Bien! ¡Mi nota ha surtido efecto!
Princesa:
Me concede un gran honor.
Estaré en mi alojamiento – Calle Flor de Loto, 25 – a medianoche.
El barrio está apartado, es romántico y perfecto para una cita.
Hasta pronto,
Preston Royce.
— ¡Observa, fiel sirviente! ¡Tengo al joven americano en mi poder!
— ¡Así es!
— ¡Ponme hermosa con tus manos mágicas! Tengo que irradiar toda la magia de oriente esta noche. Por algo me llaman Dragon Lady.
Continuará...
lunes, 17 de agosto de 2009
Terry y los piratas 14
Suscribirse a:
Enviar comentarios
(
Atom
)
No hay comentarios :
Publicar un comentario